Después de la tormenta...¿Realmente hay calma?

-Misakamon, ¿no crees que exageraste un poquito?- pregunto curioso ladeando casi todo su cuerpo

-nah, se nota que tienes que gritarles para que te hagan caso… al menos para que me hagan caso…- eso ultimo lo dije cruzándome de brazos y martillando un poco los dedos en mi brazo -además, los dos ya se traían ganas desde la reunión con la diosa- dije antes de cruzar el portal, para ese entonces ya solo nosotros 2 quedábamos fuera. Cuando lo cruzamos fue con toda la calma del mundo, y con esa misma calma fuimos hasta donde estaba Blaze -de nuevo, siento meterte en todo esto, Blaze-san-

-¡holi Leomon!- lo saludó efusivamente como un niño -¿Cómo estás?-

-esto será una de esas peleas de ego y espero que al final ya se lleven bien- dije mirándolos con un dejo de cansancio -o que al menos no se maten mutuamente…-

-si se comienzan a pasar de la raya Leomon y yo los detenemos, ¡o incluso yo solito!- por extraño que parezca, levanto sus brazos y se balanceo suavemente como una planta

Lo dicho, Renamon reacciono en la evasiva de su tamer y su posterior ingreso al portal – (¿No atacara…? ¡Hmpf! Qué más da) –recuperándome rápidamente y de un solo movimiento ingrese al portal embistiendo con fuerza atronadora para continuar con mi ataque. Durante el corto instante de alcanzar al digimon zorruno me percate del escenario, era idéntico en lo básico al anterior solo unos cuantos cambios en el ambiente como la clara sensación de ser “Digitalizados” además del cielo rojo, las estructuras estaban desgastadas como si un cataclismo hubiese pasado años atrás.

Con los brazos recogidos en una guardia alta corte distancias con el zorro tenía entendido que su especialidad era el combate rápido con engaños, con lo cual me dispuse a cerrar distancias y atacarle sin miramiento con una finta de darle un golpe zurdo que escondía una patada media con la pierna izquierda. En pocas palabras, usaría algunos trucos igual que la naturaleza de ese digimon.

La digimon gruñó con hastío, habían logrado pasar por el portal, efectivamente, pero en lo que protegía a su niño elegido de la bestialidad utilizada por Alisa, fue ella quien recibió el impacto de la misma. Tuvo apenas un momento para notar el área en la que se encontraban, casi no tenía ventajas en cuanto a escondites, por eso odiaba las canchas de basquet, estaban al descubierto, sin la protección de las sombras. Aprovechó para cambiar lugares con Alisa desapareciendo y apareciendo tras ésta, allí se lanzó contra ella propinado una patada envuelta en ascuas azules a la altura de la cintura de la híbrida. Al momento en que le propinaba la patada ya estaba agitando mi digivice para aumentar el poder utilizado en dicho ataque- De momento será mejor dejarles pelear..... -Estreche los ojos con molestia.

Spoiler:

-¿con mi poder?- respondió dudoso -pero si aún no evoluciono-

-¿hmmm? ¿rayos? Me pregunto de que estas hablando- dije como si realmente no le entendiera -¿tú sabes a qué se refiere Shio?-

-nop, ni un poco; Misakamon ¿tú sabes a qué se refiere con “mi poder”?-

-nop tampoco lo se… Blaze-san, tienes que ser más claro si quieres que te respondamos algo- aun que sonaba aun desentendida de su preguntas, lo que quise decir fue “avanza bajo tu propia responsabilidad”. En primera no quería que supieran que Shio evolución en un loco digimon come humanos en su etapa mega, en segunda… hablar del electrical master que poseo con otros… tampoco me era muy agradable. Lo bueno era que Shio y yo parecíamos siempre estar en la misma frecuencia

Mientras tanto, el enfrentamiento que tenian los otros 3 me llamo la atención algo; Akashi agitaba su mano, seguramente allí tendría su digivice, pero eso lo había visto hacer solo a Misaki una vez, si tienen el mismo digivice entonces... Alisa esta apunto de recibir un súper ataque... -no debería preocuparme, luego de los ataques de esos perfect, esto debería de ser pan comido para ella... cuando menos el resistirlo... espero- pensé preocupada -aunque igual, Renamon es mas astuta e lo que creí- pensé ahora sonriente

Antes de que me diera cuenta, había desaparecido la zorra e inclusive yo había cambiado de sitio. Esa desnivelación en mi centro gravitacional ocasionada por el repentino cambio de posición lo aproveche para dejarme llevar por la fuerza de mi propia patada girando todo mi cuerpo de tal forma que caí a un lado de frente esquivando el ataque de la zorra y quedando viéndola de nuevo; cambiar de sitio conmigo para atacarme por la espalda, su patrón de ataques resultaban predecibles… ¿O seria acaso que mi entrenamiento y entereza eran superiores…? ¿O es solo un calentamiento esta parte…?. Aterrice en mis manos, con impulso y manteniendo el flujo de la pelea moví las piernas a manera de molino para darle una patada en su pierna de apoyo.  Pese a que conseguí esquivar su patada podía sentir como mi ropa se había quemado; por algún motivo recordé la crítica de moda de parte de Littleone – (De llevar ropa más holgada estaría en problemas) –“Problemas” retumbo en mi cabeza, esa patada aunque no la recibí pude sentir el impacto de su fuerza. Tenía entendido que la fuerza de Renamon no era su punto fuerte, sino su velocidad y astucia… ¿Qué está pasando aquí?

Me prepare mentalmente para activar la energía conocida como Digisoul apenas la zorra hiciera su siguiente acción. Ciertamente estar en el suelo no era un punto favorable para mi…

off / patada desde el suelo:

Solté un gruñido de molestia al observar como la albina utilizaba la caída generada por el desnivel en su centro de gravedad y le sacaba provecho, aunque, cuando noté que esa era una táctica usada en basquet. El Ankle Break se utilizaba para desestabilizar al oponente y pasarla por medio del dribble usual o a alto nivel, usualmente se utilizaba la segunda opción pues era la más rápida. Llevé una mano a mis rojos cabellos, por un momento sentí un horrible mareo ¿Por qué? ¿Era un efecto secundario por usar el Digivice?

Selene, por su parte, no perdió el tiempo en vacilar en ningún momento, su cuerpo aún tenso venía venir otro ataque. A gran celeridad logró flexionar sus extremidades inferiores y brincar esquivando la patada. Cerró los brazos sobre si y los desplegó dejando salir una lluvia de diamantes cargados de energía hacia la joven de piel alabastrina.

Aprovechó el salto forzoso para analizar de atisbo los daños que causó en la ropa de la albina estaba levemente quemada debido a su ataque.

-….- agache la mirada y me rasque la nuca -jajajaja… pensé que serias más insistente ¿sabes?- le respondí  riéndome un poco

-también hay cosas que no puedes irle preguntándole a los demás así como así- agrego Shio encogiéndose de hombros y negando con la cabeza

-¿heh? E-espera…- iba a detenerlo pero Shio me lo impidió -¿Qué le pasara hoy…?-

-quizás tanta locura con la pareja de tsunderes sea demasiado para el- respondió sonriente -aunque si está muy serio hoy…- vimos cómo se marchaban por un momento y luego regresamos nuestra atención a la pelea

-Shio, ¿solo soy yo o Senjuro-san actúa raro…?- me di cuenta que el pelirojo actuaba como si estuviera muy cansado  algo parecido

-cielos Misakamon, andas más preguntona de lo normal- me reprocho indignado -si le pasa algo iremos a ayudarlo, hasta entonces mejor solo veamos la pelea…-

-vale…-

Con el impulso en mis piernas al ser esquivada la patada apolle las puntas de mis pies en el suelo para levantarme rápidamente dando un jap zurdo cargado de Digisoul, usaría la energía como escudo para arremeter contra el propio ataque de la zorruna digital, no lo destruiría pero al menos reduciría el impacto en mí; inmediatamente después daría un salto dando un seguimiento de 2 patadas altas rectas con ambos pies cargados de Digisoul. Ignoraba completamente como es que esa Renamon tenía tanta fuerza física pero no esperaría a recibir otro ataque para averiguarlo.

Patada Alta Recta:

Inmediatamente después de esquivarla envolvió su puño en digisoul dando un jap siniestro que le serviría como escudo para reducir el impacto del Koyosetsu, hasta el momento sentía que Alisa se lo estaba poniendo fácil pero si con eso estaba satisfecha no me molestaba... Bueno quizás si lo hacía un poco ya que sería menospreciar al oponente pero mis ganas de ganar eran un poco mas superiores a los ideales. Selene desapareció en cuanto la albina saltó para lanzar la primera patada al aire, esta vez apareció, cuando la de piel alabastrina dio una segunda patada, se sujetó del maléolo de la misma, con los miembros superiores e inferiores forrados en brasas azules como teas, y tomando impulso arremetió con ambas patas contra la cara de la muchacha.

Blaze se había ido, pero así como se fue regreso… aun que tenía un semblante extraño, igual estuvo actuado extraño todo el tiempo por lo que decidí mejor no preguntarle nada -¿no se les hace extraño que con todo el ruido que hacen ellas 2, no haya más digimon por aquí?- preguntó Shio mirando a todas partes con duda

-¿heh…? Pues… ahora que lo dices, cuando venimos la otra vez había muchos más en todas partes, y ahora… solo nosotros- explique para después sacar el digivice y revisar la brújula en este -que extraño… creo que no sirve bien en este sitio- murmure para mí misma pues el d-ark tenía problemas para leer el aria hasta que repentinamente registro una flecha roja que se movía a gran velocidad hacia nosotros, más bien, hacia Renamon y Alisa

-¡…!- antes de que pudiera reaccionar Shio había salido disparado para embestir y quitar del camino del digimon a las 2 que peleaban. En un abrir y cerrar de ojos había un gigantesco león de color negro y un aura también obscura cubriéndole

-Saber Leomon Virus… digimon en etapa mega- alcance a leer la información del digimon antes que este soltara un gran rugido que retumbo en todo, se notaba a simple vista que no era para nada amigable y que más bien éramos todos su presa

ost (?):

De alguna forma creía que podía ajustarme a la velocidad de la zorruna amarilla, vaya error prepotente de mi parte. Renamon era un digimon caracterizado por su velocidad tan abrumadora que podía desaparecer y aparecer en un suspiro a su antojo. No importaba que tan flexible era, o que tantos planes, estrategias o reacciones podría generar en mi mente en esa brecha de tiempo minúscula que le llevo el aparecer, sujetar mi tobillo y como guirlanda en el pastel arrojar una patada doble imbuida en llamas azules. ¿Qué hacer…? Simple, un bloqueo de brazos irradiando Digisoul… otra cosa habría sito estúpida y pérdida de tiempo solo imaginármelo. ¿Pero que buscaba esa zorra? ¿Arrancarme la pierna y la cabeza acaso? Que sea una hibrida no me quita la “Fragilidad” en algunas zonas de mi cuerpo, además de que aun siendo una rookie su tamaño superaba el mío por poco; estirando su cuerpo entero en este tipo de patadas sin un bloqueo de mi parte acabaría con severas laceraciones – (¿Es su forma de cobrarse el trato que tuve para con su tamer? ¡Hmpf!)

De alguna forma me sentí como Belzeebumon cuando le ataque y el solo resistió; repentinamente fuimos empujadas por algo… un borrón rojo que resultó ser el raptor de Littlen one. Por obviedad  termine al menos yo en el suelo a unos metros de donde nos encontrábamos, dirigí mi mirada contrariada o mejor dicho, furiosa contra la dueña del sub normal gritándole – ¿Por qué justo ahora--? –fui interrumpida por un rugido abrumador salido del mismísimo infierno; ese sonido me helo la sangre, lo conocía perfectamente bien a tal grado que visualice su imagen antes de siquiera mi cerebro mandara la señal de girar la cabeza instintivamente al origen – Black… Saber… Leomon… –murmure con los ojos abiertos a su máxima capacidad apretando el puño siniestro – ¡Al fin…! –aspire una bocanada de aire sacando la caja de medicinas que siempre acarreaba vaciando su contenido en mi boca mascándolas frenéticamente. Entre esos medicamentos había calmantes de diferentes tipos; supondrían ser el medio para evitar descontrolarme, sinceramente dudo de su efectividad en este punto…

Reincorporándome de un salto al tiempo que extraje el digivice en mi propiedad del portador en mi muslo explote en medio de un frenesí Digisoul en mi mano chocándola en la “Cabeza” del dispositivo. Me habían advertido que las transformaciones a digimon de esta forma eran sumamente dolores, mas sin embargo las sensaciones me embriagaron e impulsaron a atacar al leonido demonio negro. Vuelta ahora yo un león de nieves rugí abalanzándome de un salto a la creatura ladrando con furia incomparable su nombre – ¡Muere! –en mi ascenso había juntado energía gelida la cual dispare en acompañamiento de aquel dictamen, esa ráfaga blanquecina rápidamente tomo forma de una cabeza de león rampandó y rugiente hacia el demonio…