Conectarse
Últimos temas
Ira del agua
Página 3 de 4. • Comparte
Página 3 de 4. • 1, 2, 3, 4
Re: Ira del agua
Me quejo de Zess y soy igual… ¡Hmpf! Yo soy Asakura Taishin, el gusto es mío –respondió la presentación de la chica de aire para después prestarle atención al hombre y sus artilugios; evitar pensar “Este tipo es como una navaja suiza” le fue imposible. Asegurándose de reservarse su asombro se limitó a escuchar todo lo que decía el mayor – Tch… está bien, no entiendo muy bien quien es la tal Hibiki pero si te refieres a ella de esa forma supongo que es alguien importante para todos. Sigo sin verte como un aliado, Blaze, mas con una sola línea que no dice nada –respondió en un claro fastidio rascándose la nuca.
Igualmente, adelántense si quieren, por mi parte hablare con el espíritu guardián del elefante. Puede que sepa que quiere el huesudo además de que si tengo razón en algo, podré usar a Mercurymon –comentó quitándose la camisa, revelando que su playera negra carecía de mangas y respaldo – Si este mundo y cualquiera en el universo está conectado al mundo de los muertos, podre moverme fácilmente incluso si voy “Sola” por eso, si quieren adelántense. Yo no puedo quedarme con tantas dudas a sabiendas que el huesos no nos responderá por las buenas, y bueno, luego de darle una paliza dudo que pueda si quiera evitar desintegrarse.
Desde su xros, que aun permanecía cubriéndole la espalda en su totalidad, emergieron un par de picas que al llegar a cierta envergadura se abrieron como si de los huesos de las alas de murciélago se tratase. Dio un salto al vacío sin vacilar, para desplegar sus alas y volar hacia el elefante. Aterrizando en lo que le pareció un balcón – Espíritu, necesito imperiosamente hablar contigo, ¿Me prestarías tu tiempo? –cuestionando con una actitud por completo diferente a la que usaba con cualquier humano vivo, esperando incluso a tener permiso para ingresar al recinto del que era dueño el espíritu.
Igualmente, adelántense si quieren, por mi parte hablare con el espíritu guardián del elefante. Puede que sepa que quiere el huesudo además de que si tengo razón en algo, podré usar a Mercurymon –comentó quitándose la camisa, revelando que su playera negra carecía de mangas y respaldo – Si este mundo y cualquiera en el universo está conectado al mundo de los muertos, podre moverme fácilmente incluso si voy “Sola” por eso, si quieren adelántense. Yo no puedo quedarme con tantas dudas a sabiendas que el huesos no nos responderá por las buenas, y bueno, luego de darle una paliza dudo que pueda si quiera evitar desintegrarse.
Desde su xros, que aun permanecía cubriéndole la espalda en su totalidad, emergieron un par de picas que al llegar a cierta envergadura se abrieron como si de los huesos de las alas de murciélago se tratase. Dio un salto al vacío sin vacilar, para desplegar sus alas y volar hacia el elefante. Aterrizando en lo que le pareció un balcón – Espíritu, necesito imperiosamente hablar contigo, ¿Me prestarías tu tiempo? –cuestionando con una actitud por completo diferente a la que usaba con cualquier humano vivo, esperando incluso a tener permiso para ingresar al recinto del que era dueño el espíritu.
Taishin
Re: Ira del agua
Viré mi mirada a la joven recién llegada que habíamos ignorado con nuestro coloquio de decisiones, presentarme por segunda vez era algo latoso pero no quería que la pequeña rubia se mofase aún más de mi persona- Me llamo Zess. -Simplifique dándome cuenta de lo exiguo que pronunciaba mi nombre real, todos sabían mi alias pero probablemente no mí nombre real, así era como lo deseaba pues aunque lo dijera acabarían por darme un mote como a todo el mundo, mejor era dar mi seudónimo de buenas primeras y ya. Dejando de lado aquello vi a dos criaturas salir del digivice que traía Izayoi, no se parecía a ninguno que haya visto pero el "Emperor Eye" se encargó de informarle sobre ambos y el artilugio "AppDrive".
La negación de Taishin por ir con nosotros me parecía sensata pero algo me decía que quedarme con ella era lo correcto y podía mandar a aquellos dos a por Rio, luego reunirnos e ir a por Misaki, Saya y Misaka. Saque las tijeras nuevamente para hacer un tajo en el aire recordando a Rio, la rubia se había ido e iba a alcanzarla cuando se fueran- Por aquí pueden encontrar a Rio, iré con Taishin hasta el elefante y me reuniré con ustedes cuando acabemos. -Señalé el portal con mi mano y con la otra extendida llamé a la mirilla en mi ojo para guárdala, luego al abanico de corazones que me permitiría volar.
La negación de Taishin por ir con nosotros me parecía sensata pero algo me decía que quedarme con ella era lo correcto y podía mandar a aquellos dos a por Rio, luego reunirnos e ir a por Misaki, Saya y Misaka. Saque las tijeras nuevamente para hacer un tajo en el aire recordando a Rio, la rubia se había ido e iba a alcanzarla cuando se fueran- Por aquí pueden encontrar a Rio, iré con Taishin hasta el elefante y me reuniré con ustedes cuando acabemos. -Señalé el portal con mi mano y con la otra extendida llamé a la mirilla en mi ojo para guárdala, luego al abanico de corazones que me permitiría volar.
Invitado
Invitado
Re: Ira del agua
No tienen por qué tomarse tan gran molestia, puedo cuidarme por mi misma.
Explicaba mientras terminaba de cruzar el portal y con ello llegaba al planeta donde parecía que todos se reunían.
Vaya desastre…
Pensé mirando a mi alrededor; sabía que estábamos en una guerra, pero no pensé que un solo planeta tendría bajas tan alarmantes.
El espíritu que hablo conmigo segundos atrás, parecía estar interesado en hablar con la espíritu de la bestia de este planeta; deberíamos de quedarnos también a escuchar, Blaze, señorita.
No espere una respuesta y con ayuda de Alistar, un Coredramon Blue, volé hacia donde veía a los otros dos humanos. me preguntaba cual quera al que se le ocurrió usar su cerebro en lugar de caer de cabeza contra los clones restantes de Eita, mas sin embargo opte por esperar en silencio.
Explicaba mientras terminaba de cruzar el portal y con ello llegaba al planeta donde parecía que todos se reunían.
Vaya desastre…
Pensé mirando a mi alrededor; sabía que estábamos en una guerra, pero no pensé que un solo planeta tendría bajas tan alarmantes.
El espíritu que hablo conmigo segundos atrás, parecía estar interesado en hablar con la espíritu de la bestia de este planeta; deberíamos de quedarnos también a escuchar, Blaze, señorita.
No espere una respuesta y con ayuda de Alistar, un Coredramon Blue, volé hacia donde veía a los otros dos humanos. me preguntaba cual quera al que se le ocurrió usar su cerebro en lugar de caer de cabeza contra los clones restantes de Eita, mas sin embargo opte por esperar en silencio.
Rio
Re: Ira del agua
Guardaba silencio viendo a Rio, llegar al planeta y acercándose hasta el grupo para luego fijarse en aquella lagartija gigante que había aparecido ahora adelante de estos. ─De acuerdo.─ Menciona y se quedo ahí a esperar que hablaran para escuchar la conversación junto al grupo de elegidos, haber si podría ayudarles en algo aquella información.
Blaze
Admin
Re: Ira del agua
Izayoi escuchó lo que dijeron los demás, tomó a Raito en brazos y se acercó a Blaze en silencio, haría caso porque era la opción más sensata, escuchar antes de actuar era lo que había prometido hacer a quien le había dado la reliquia del viento
-entendido...
-entendido...
Izayoi
Re: Ira del agua
– ¿Eh? Um… si, ¿Ocurre algo? Por favor, pasen… –respondió nerviosa; había entendido que se marcharían a continuar con su misión.
– ¡Ajajajaja! Tan tímida como siempre, Mipha –con una vos tosca y socarrona se hizo presente un espíritu más dentro de aquel elefante, junto a este apareció en un torbellino de luz una salamandra mecanizada con el mismo tipo de artilugios que el elefante – Vaya… pensé que solo un par se quedaría, en fin. Escuchen, humanos, lo que les depara solo lo podrán cumplir los que estén realmente listos. Ese impresentable de Eita no se anda con niñerías cuando se trata de matar a los que se le oponen –explico, pero guardo silencio mirando a su compañera.
– ¿Daruk…? No quisiera mostrarles esto, pero… –varios pilares surgieron, los cuales sostenían lo que parecían ser pantallas de alta tecnología pero igualmente compuestas de piedra. En esas pantallas se proyectaron diferentes imágenes, en las que se presentaban cada una de las batallas, teniendo varias resultados fatales para los opositores – Mientras estuvimos bajo el yugo de Eita, al igual que sus clones, nos encontrábamos interconectados subconsciente y telepáticamente.
– Temo decirles que algunas de sus victorias fueron por mera suerte, si bien debo admitir que fueron victorias sorprendentes, nuestras compañeras, las bestias divinas no estaban en el apogeo de su fuerza o control. ¿Entienden? Si de verdad quieren continuar, estén listos para la muerte.
– ¡Hmpf! Dudo que estos tontos simios que sin ayuda de sus bestias digitales carecen de la habilidad de volar, puedan hacer algo –dicto un nuevo espíritu, recién llegando, junto a otra mas – Solo mira tu planeta, Mipha, se quedó totalmente expuesto al perder su poderosa armada en un parpadeo. O tu planeta, Daruk, termino con un tempano.
– ¡Revali! -exclamo en reprimenda la espíritu que llego con el prepotente ave. La mas humana de entre todos, por decirlo de alguna forma...
– ¿Qué? Es la verdad. Lo sabes muy bien, Urbosa.
– Bueno, a diferencia de Mipha, mi planeta no sufre daño alguno, la zagala congelo en la cantidad justa... incluso cuando el hielo se derrita no afectara a ningún volcán, ni a los habitantes ¡Ajajaja! Da repelús que existan humanos así.
– ¡Ajajajaja! Tan tímida como siempre, Mipha –con una vos tosca y socarrona se hizo presente un espíritu más dentro de aquel elefante, junto a este apareció en un torbellino de luz una salamandra mecanizada con el mismo tipo de artilugios que el elefante – Vaya… pensé que solo un par se quedaría, en fin. Escuchen, humanos, lo que les depara solo lo podrán cumplir los que estén realmente listos. Ese impresentable de Eita no se anda con niñerías cuando se trata de matar a los que se le oponen –explico, pero guardo silencio mirando a su compañera.
– ¿Daruk…? No quisiera mostrarles esto, pero… –varios pilares surgieron, los cuales sostenían lo que parecían ser pantallas de alta tecnología pero igualmente compuestas de piedra. En esas pantallas se proyectaron diferentes imágenes, en las que se presentaban cada una de las batallas, teniendo varias resultados fatales para los opositores – Mientras estuvimos bajo el yugo de Eita, al igual que sus clones, nos encontrábamos interconectados subconsciente y telepáticamente.
– Temo decirles que algunas de sus victorias fueron por mera suerte, si bien debo admitir que fueron victorias sorprendentes, nuestras compañeras, las bestias divinas no estaban en el apogeo de su fuerza o control. ¿Entienden? Si de verdad quieren continuar, estén listos para la muerte.
– ¡Hmpf! Dudo que estos tontos simios que sin ayuda de sus bestias digitales carecen de la habilidad de volar, puedan hacer algo –dicto un nuevo espíritu, recién llegando, junto a otra mas – Solo mira tu planeta, Mipha, se quedó totalmente expuesto al perder su poderosa armada en un parpadeo. O tu planeta, Daruk, termino con un tempano.
– ¡Revali! -exclamo en reprimenda la espíritu que llego con el prepotente ave. La mas humana de entre todos, por decirlo de alguna forma...
– ¿Qué? Es la verdad. Lo sabes muy bien, Urbosa.
– Bueno, a diferencia de Mipha, mi planeta no sufre daño alguno, la zagala congelo en la cantidad justa... incluso cuando el hielo se derrita no afectara a ningún volcán, ni a los habitantes ¡Ajajaja! Da repelús que existan humanos así.
Etincel
Admin
Re: Ira del agua
-¿hmm…?- mire a todas partes dándome cuenta que el pollo fantasma nos había tele-transportado a otra de esas bestias de piedra -al menos parece que todos están bien…- pensé mirando a cada uno hasta que vi a Saya -¡Saya! ¿Estas herida?- corrí directamente hacia ella tanto Shio como yo regresamos a la normalidad, Soma solo involuciono a Wisemon -p-parece que estas bien...- susurre con alivio
Misaka
Re: Ira del agua
Escuchar la voz de Misaka me partió el alma de nueva cuenta, le había prometido protegerla a ella y a las demás por igual, al embargo falle una y otra vez – Lo estoy… –murmuré interrumpiéndola – Es doloroso… demasiado. Fue mi culpa; mis acciones impetuosas les costó la vida… estoy tan… cansada… –me dejé caer sobre mis rodillas, por la debilidad en las mismas… yo solo quería que… todo acabara.
Saya
Re: Ira del agua
Escuchando lo que Saya decía, Soma desvió la mirada al suelo, se sentía igual o incluso más culpable que nosotras juntas. Al final, el no pudo detener a Eita cuando recién tenía en el las memorias, tampoco proteger y salvar a Alisa. Para colmo tenía en su conciencia el haber estado en primera fila para ser testigo de todo lo que había hecho Eita luego de todo lo anterior sin poder hacer otra cosa que no fuera observar y obedecerle. -incluso con todo mi poder, fui un completo inútil… ni si quiera tiene caso echarle la culpa a los demás elegidos. Ese ave humana ya hablo por todos…- pensaba dolido y decepcionado de si mismo
Shio y yo la atrapamos antes de que cayera por completo -entonces descansemos, déjame ayudarte- le dije sonriendo como de costumbre mientras me acomodaba su brazo por sobre mis hombros -aquí, déjamelo a mí. Descansemos en el libro de Soma- dije dejándola apoyar todo su peso y carga en mí, sin dejar de sonreírle mientras caminábamos hacia Soma para que nos metiera en su libro
-no te preocupes Saya-nee-chan, Soma y yo estaremos atentos a todo y pensaremos que hacer; ustedes descansen muchito- dijo Shio alegremente para despreocuparla lo más posible antes de que entráramos en el libro de Soma
-Eita Fudo…- murmuró apretando el puño viendo las pantallas -incluso Lambda…- agrego con el mismo murmullo rabioso; una de las cosas buenas de esta evolución, es que nadie podía ver sus expresiones más allá de la forma que tomasen las luces amarillas que eran sus ojos -…- murmuro para sí mismo tan bajo que ni el mismo podría decir si se pudo escuchar o no y por eso solo el podía estar consciente de lo que dijo
-parece que yo no podemos darnos el lujo de ser amables con Eita, verdad, ¿Soma?- le pregunto a su “hermano” con una voz por completo diferente a la suya; no era para nada dulce, un tanto gangosa e infantil como siempre… era una hueca y gutural. Incluso con lo bien iluminada de la habitación, su rostro no era más que una sombra
-sí… estamos por completo lejos del final dulce y agradable…-
-que mal… de verdad quería, un final bonito e idealista… pero la piedad se esfumo por no actuar a tiempo. Incluso Tachibana parece entenderlo…- suspiró un leve aliento de fuego -hey, pajarraco parlanchin; al menos nosotros no somos un puñado de fantasmas que necesitan que otros salven nuestras preciadas posesiones. Ve con tu prepotencia a plantarle cara a Eita original, a ver si tan fuerte eres, anda… gallina cantora…- gruño mostrando al fin su rostro, sus pupilas eran alargadas como las de una bestia enloquecidad al igual que su exprecion
Shio y yo la atrapamos antes de que cayera por completo -entonces descansemos, déjame ayudarte- le dije sonriendo como de costumbre mientras me acomodaba su brazo por sobre mis hombros -aquí, déjamelo a mí. Descansemos en el libro de Soma- dije dejándola apoyar todo su peso y carga en mí, sin dejar de sonreírle mientras caminábamos hacia Soma para que nos metiera en su libro
-no te preocupes Saya-nee-chan, Soma y yo estaremos atentos a todo y pensaremos que hacer; ustedes descansen muchito- dijo Shio alegremente para despreocuparla lo más posible antes de que entráramos en el libro de Soma
-Eita Fudo…- murmuró apretando el puño viendo las pantallas -incluso Lambda…- agrego con el mismo murmullo rabioso; una de las cosas buenas de esta evolución, es que nadie podía ver sus expresiones más allá de la forma que tomasen las luces amarillas que eran sus ojos -…- murmuro para sí mismo tan bajo que ni el mismo podría decir si se pudo escuchar o no y por eso solo el podía estar consciente de lo que dijo
-parece que yo no podemos darnos el lujo de ser amables con Eita, verdad, ¿Soma?- le pregunto a su “hermano” con una voz por completo diferente a la suya; no era para nada dulce, un tanto gangosa e infantil como siempre… era una hueca y gutural. Incluso con lo bien iluminada de la habitación, su rostro no era más que una sombra
-sí… estamos por completo lejos del final dulce y agradable…-
-que mal… de verdad quería, un final bonito e idealista… pero la piedad se esfumo por no actuar a tiempo. Incluso Tachibana parece entenderlo…- suspiró un leve aliento de fuego -hey, pajarraco parlanchin; al menos nosotros no somos un puñado de fantasmas que necesitan que otros salven nuestras preciadas posesiones. Ve con tu prepotencia a plantarle cara a Eita original, a ver si tan fuerte eres, anda… gallina cantora…- gruño mostrando al fin su rostro, sus pupilas eran alargadas como las de una bestia enloquecidad al igual que su exprecion
Misaka
Re: Ira del agua
Afinando la vista, la niña mostro un claro desagrado cuando, no solo el hombre de negro, sino los otros dos tamer también se quedaron, peor al ver a los otros tamer. “¿No se suponía que tenían mucha prisa por ponerle fin al huesudo?” pensaba entre tantas cosas más. Tragándose el gruñido que casi se le escapa de entre los dientes y labios, agradeció con una reverencia ante el espíritu el que les permitiera quedarse. Prefiriendo reservarse sus comentarios, enfocó su atención en los monitores que recién se presentaban; claro, era solo una humana, así que para ella sola sería imposible prestar caso a todos. Allí es cuando la utilidad de su xros, se volvía latente. Debido a las muchas gemas que fungían como ojos, su xros podía estar atenta de los monitores y susurrarle un resumen de cada una en tiempo real mientras ella misma se enfocaba en una batalla que llamo su atención.
Murmullos de la xros, acomodándose en las pausas de sus propios pensamientos como un coro gregoriano perfecto, le permitieron hilar cabos segundo a segundo. En principio, las emociones de ira, desprecio, enojo, rencor y parecidas dominaban su semblante. Realmente el odio era algo que se acrecentaba en su interior por el tipo de “Dios” que pretendía ser el tal Eita; pero, esas emociones fueron gradualmente eclipsadas por el asombro y el aparente entendimiento de un detalle – Oigan… –susurró con un ademan de mano casi nulo, como el de un niño que acaba de ver algo increíble en televisión y su estupefacción no le permite mayor movimiento que un simple y llano va y ven de su extremidad principal – ¡Oigan! –replicó al darse cuenta de su falta de fuerza en voz anterior – ¿No les parece que los clones del tipo ese son jodidamente diferentes? No me refiero a solo su aspecto físico… es como si cada uno tuviera una personalidad por completo diferente –explico atropelladamente señalando la pantalla que ella veía, la cual resultaba ser la pelea de uno de los tantos Eita contra otra hunter que parecía estar severamente lastimada y apenas pudiendo seguirle el paso.
– Siguiendo las enseñanzas del shintoísmo, es como si el precio para multiplicarse, fuera dividir su propio yo. En otras palabras, no se clono a sí mismo, dividió los aspectos de su ser y por ende, personalidad, dándoles aspecto físico. –explicó la xros – Incluso una de sus formas, lo dijo; aquella del vestido rosado y pomposo.
– Pero entre todos, el de esta pelea parece ser el más cabrón y jodido de todos. Hasta cierto punto se pude entender a los demás, o sea, son mínimamente humanos… pero el de esta pantalla parece un jodido monstruo sin sentimientos “buenos” –tragó en seco, aun mirando sin parpadear el monitor – S-solo miren, a Blaze le mato el ejército de pescaditos para amedrentarlo, pero el de ésta mato por completo a sangre fría y solo porque a si a esa niña de trenza. La pobre ya estaba prácticamente muerta por el rayo pero a Eita le valió y volvió a atacarla en una masacre total –expreso con emociones fuertemente entremezcladas.
– El barbudo tiene razón, las victorias que conseguimos fueron de pura chiripa; hay divisiones que en verdad podrían masacrarnos a todos con un simple suspiro.
– ¡Tch! ¿Y de quien son todos esos Digimon? ¿Dónde están sus Tamer? ¡¿A quién vergas se le ocurre mandar solos a sus Digimon sin más contra un flipado como Eita?! –rugió exasperada dando un fuerte desplante y alzando su diestra en puño, quien haya sido o era muy confiado o solo un completo imbécil – ¡¿Se creen que sus Digimon son desechables y substituibles?! –agregaba con la mandíbula tan apretada que era difícil creer que sus dientes no terminaran descrebajandose por el yugo autoimpuesto.
Murmullos de la xros, acomodándose en las pausas de sus propios pensamientos como un coro gregoriano perfecto, le permitieron hilar cabos segundo a segundo. En principio, las emociones de ira, desprecio, enojo, rencor y parecidas dominaban su semblante. Realmente el odio era algo que se acrecentaba en su interior por el tipo de “Dios” que pretendía ser el tal Eita; pero, esas emociones fueron gradualmente eclipsadas por el asombro y el aparente entendimiento de un detalle – Oigan… –susurró con un ademan de mano casi nulo, como el de un niño que acaba de ver algo increíble en televisión y su estupefacción no le permite mayor movimiento que un simple y llano va y ven de su extremidad principal – ¡Oigan! –replicó al darse cuenta de su falta de fuerza en voz anterior – ¿No les parece que los clones del tipo ese son jodidamente diferentes? No me refiero a solo su aspecto físico… es como si cada uno tuviera una personalidad por completo diferente –explico atropelladamente señalando la pantalla que ella veía, la cual resultaba ser la pelea de uno de los tantos Eita contra otra hunter que parecía estar severamente lastimada y apenas pudiendo seguirle el paso.
– Siguiendo las enseñanzas del shintoísmo, es como si el precio para multiplicarse, fuera dividir su propio yo. En otras palabras, no se clono a sí mismo, dividió los aspectos de su ser y por ende, personalidad, dándoles aspecto físico. –explicó la xros – Incluso una de sus formas, lo dijo; aquella del vestido rosado y pomposo.
– Pero entre todos, el de esta pelea parece ser el más cabrón y jodido de todos. Hasta cierto punto se pude entender a los demás, o sea, son mínimamente humanos… pero el de esta pantalla parece un jodido monstruo sin sentimientos “buenos” –tragó en seco, aun mirando sin parpadear el monitor – S-solo miren, a Blaze le mato el ejército de pescaditos para amedrentarlo, pero el de ésta mato por completo a sangre fría y solo porque a si a esa niña de trenza. La pobre ya estaba prácticamente muerta por el rayo pero a Eita le valió y volvió a atacarla en una masacre total –expreso con emociones fuertemente entremezcladas.
– El barbudo tiene razón, las victorias que conseguimos fueron de pura chiripa; hay divisiones que en verdad podrían masacrarnos a todos con un simple suspiro.
– ¡Tch! ¿Y de quien son todos esos Digimon? ¿Dónde están sus Tamer? ¡¿A quién vergas se le ocurre mandar solos a sus Digimon sin más contra un flipado como Eita?! –rugió exasperada dando un fuerte desplante y alzando su diestra en puño, quien haya sido o era muy confiado o solo un completo imbécil – ¡¿Se creen que sus Digimon son desechables y substituibles?! –agregaba con la mandíbula tan apretada que era difícil creer que sus dientes no terminaran descrebajandose por el yugo autoimpuesto.
Taishin
Re: Ira del agua
Cuando vi a la joven de cabellos negros, ojos rojos y lentes sentí alivio, Saya estaba viva al igual que Misaka, pude exhalar sin sentir el peso sobre mi pecho y hombros, sin embargo volver a calmarme no era algo que pudiese hacer, hecho tras hecho comenzaron a aparecer en cada una de las pantallas al mismo tiempo que otras bestias mecánicas entraban en escena junto con sus espíritus dominantes. Antes que pudiera acercarme Misaka y Saya, la primera se llevó a la segunda dentro del libro de su Wisemon, debían estar cansadas. Clavé, en la palma de mis manos, las blancas uñas, frustrado por no ser de ayuda.
Una mordida a mis labios bastó para ponerme al corriente, observé cada una de las pantallas reconociendo a los elegidos que en ellas se exhibían, o al menos a algunos pues no conocía a todos en persona, solo de palabra por parte de mis digimon; quienes ahora intentaban ver la situación desde el digivice.
Saqué la mirilla mientras Taishin hablaba, ésta giró para ajustarse sobre la pupila y dar con las pantallas de las que ella hablaba; Eita era así desde que le conocimos o al menos desde que le vi por primera vez en la batalla que tuvo con Hibiki; posteriormente pasé aquellas con las que dio el ejemplo- Cuando lo conocí también era así, un cabrón, pero parece que las buenas emociones que se supone tiene estuvieran cegadas. Según entiendo, era amigo de Hibiki o al menos es la que parece conocerlo más. -Con un chasquido del sin hueso guardé la mira dentro del collar, lanzando mis ojos plateados hacia Taishin por el rabillo de estos.
Cuando nos separamos a fin de combatir a los clones de Eita, la niña con armadura dejó que sus digimon vayan a por algunos de ellos, no esperaba que acabasen así, no era.... No era justo, se había esforzado tanto por lo que deseaba y confío en los digimon que tenía, no, confiaba en los digimon que tenia para detener a los Eita- O alguien que confía en ellos, los elegidos y digihuman que ves reunidos aquí son los únicos que se presentaron para salvar partes de la tierra o los que están en las pantallas, aunque algunos llegamos tarde antes o después. Hibiki debió mandar a sus digimon para que destruyan a los clones restantes. -Trataba de no hablar demás, acabaría mal en ese caso, siempre había sido una persona que mientras menos palabras fuese a utilizar mejor le iba. No tenía derecho a deprimirme ni nada similar, levanté la cabeza con algo de arrogancia, conteniendo el fastidio cuando arrugada la tela en mis bolsillos.
Una mordida a mis labios bastó para ponerme al corriente, observé cada una de las pantallas reconociendo a los elegidos que en ellas se exhibían, o al menos a algunos pues no conocía a todos en persona, solo de palabra por parte de mis digimon; quienes ahora intentaban ver la situación desde el digivice.
Saqué la mirilla mientras Taishin hablaba, ésta giró para ajustarse sobre la pupila y dar con las pantallas de las que ella hablaba; Eita era así desde que le conocimos o al menos desde que le vi por primera vez en la batalla que tuvo con Hibiki; posteriormente pasé aquellas con las que dio el ejemplo- Cuando lo conocí también era así, un cabrón, pero parece que las buenas emociones que se supone tiene estuvieran cegadas. Según entiendo, era amigo de Hibiki o al menos es la que parece conocerlo más. -Con un chasquido del sin hueso guardé la mira dentro del collar, lanzando mis ojos plateados hacia Taishin por el rabillo de estos.
Cuando nos separamos a fin de combatir a los clones de Eita, la niña con armadura dejó que sus digimon vayan a por algunos de ellos, no esperaba que acabasen así, no era.... No era justo, se había esforzado tanto por lo que deseaba y confío en los digimon que tenía, no, confiaba en los digimon que tenia para detener a los Eita- O alguien que confía en ellos, los elegidos y digihuman que ves reunidos aquí son los únicos que se presentaron para salvar partes de la tierra o los que están en las pantallas, aunque algunos llegamos tarde antes o después. Hibiki debió mandar a sus digimon para que destruyan a los clones restantes. -Trataba de no hablar demás, acabaría mal en ese caso, siempre había sido una persona que mientras menos palabras fuese a utilizar mejor le iba. No tenía derecho a deprimirme ni nada similar, levanté la cabeza con algo de arrogancia, conteniendo el fastidio cuando arrugada la tela en mis bolsillos.
Invitado
Invitado
Re: Ira del agua
Escuchaba todo en pleno silencio mientras miraba las pantallas que se habían formado las cuales mostraban cada una de las batallas,
contra los clones de Eita, que se habían llevado a cabo incluyendo la suya, mientras escuchaba las palabras del resto del grupo. (Ahora que lo veo de esa forma, es cierto quizás esa sea la limitación que tenga entonces... La pregunta es como saber el número exacto de estos, pero no deben ser demasiados...) Pensaba mientras observaba cada una de las batallas aunque al ver la de Hibiki, la cual había sido más una masacre apretó un poco los puños, mostrándose ahora en su rostro bastante furia contra Eita, tanta era que expulso levemente a su alrededor fuego. Suspiro para calmarse, no podía perder la cabeza, por ahora solo debían de oír a las bestias y ver las batallas.
Blaze
Admin
Re: Ira del agua
La Idol miraba las imágenes expuestas y sólo podia sentir dolor, odio, tristeza, rencor... no podía con todo ello, como deseaba haber podido evitar todas esas muertes, pero en ese momento, lágrimas de dolor e impotencia recorrían sus blancas mejillas... su cuerpo actuó por cuenta propia, comenzando a cantar por aquellas almas perdidas en batalla
- La canta en la version triste u,u desde el minuto 18:32 :
Izayoi
Re: Ira del agua
Es muy fácil hablar y criticar a los demás sin conocimiento de causa. Como dice el hombre, Hibiki tuvo que dividir sus fuerzas para evitar lo más posible masacres; tanto de algún planeta como de nuestros propios aliados, a sabiendas que solo mandaba al matadero a sus digimon, incluso ellos lo tenían en claro. Pero, hay algo que todos parecen dar por hecho o no quieren entender… Hibiki no es fuerte, por el contrario, es débil en todo aspecto, lo que afecta a sus Digimon que tampoco son precisamente suyos, puesto a que su loader es de otra… persona.
Expliqué cruzada de brazos, observando la pantalla en la que ella peleaba tras a ver recorrido con la mirada cada una en la que sus Digimon habían combatido. Con la misma calma que siempre porte, proseguí con lo que explicaba.
Ya que eres nueva, te lo diré claramente; los elegidos de la diosa, así como los que vinieron después, no tienen idea sobre lo que es el compañerismo o la lealtad; se les es fácil dejarle todo el trabajo a los que parecen más fuertes. Por si fuera poco, se excusan en tonterías como “¿Por qué debería de hacerlo yo?” “Que se encargue otro” “Solo soy un niño” “No cargare con esa responsabilidad” “¿Por qué me debo de lastimar solo yo?” y así sucesivamente, lo que nos lleva al ahora… ahora… incluso ahora le dejamos toda la carga a la que creemos más fuerte pero que al final no es más que una papanatas que cree en la redención, en la nobleza y demás cosas de la misma índole.
Estruje mi propio brazo al escuchar cantar a otra de las nuevas, dirigiendo mi mirar a esta. Cerré los ojos por un segundo, para inmediatamente después abrirlos aun en total calma.
Si estas cantando para poder relajar tus propios nervios no te diré nada, sin embargo, si lo haces en nombre de sus Digimon, te pediré en su nombre que guardes silencio. Solo ella puede cantarles, por ende solo ella tiene derecho a despedirlos con una canción lagrimosa o luctuosa.
Volví a pestañar para regresar mi atención al monitor de Hibiki.
A estas alturas no tiene caso o sentido sentir furia, dolor o cualquier emoción sobre medida porque todo esto pudo ser evitado. Como han dicho esos dos digimon solo nos queda un camino, derrotar con todo nuestro poder a Eita y rogar porque eso baste. Algo no me termina de encajar en todo esto, pero cada segundo cuenta. Desde el principio Hibiki era incapaz de siquiera hacer llegar su voz a Eita, con las heridas que ahora tiene más el desgaste energético dificulto que pueda si quiera seguir levantándose como nos tiene acostumbrados.
Expliqué cruzada de brazos, observando la pantalla en la que ella peleaba tras a ver recorrido con la mirada cada una en la que sus Digimon habían combatido. Con la misma calma que siempre porte, proseguí con lo que explicaba.
Ya que eres nueva, te lo diré claramente; los elegidos de la diosa, así como los que vinieron después, no tienen idea sobre lo que es el compañerismo o la lealtad; se les es fácil dejarle todo el trabajo a los que parecen más fuertes. Por si fuera poco, se excusan en tonterías como “¿Por qué debería de hacerlo yo?” “Que se encargue otro” “Solo soy un niño” “No cargare con esa responsabilidad” “¿Por qué me debo de lastimar solo yo?” y así sucesivamente, lo que nos lleva al ahora… ahora… incluso ahora le dejamos toda la carga a la que creemos más fuerte pero que al final no es más que una papanatas que cree en la redención, en la nobleza y demás cosas de la misma índole.
Estruje mi propio brazo al escuchar cantar a otra de las nuevas, dirigiendo mi mirar a esta. Cerré los ojos por un segundo, para inmediatamente después abrirlos aun en total calma.
Si estas cantando para poder relajar tus propios nervios no te diré nada, sin embargo, si lo haces en nombre de sus Digimon, te pediré en su nombre que guardes silencio. Solo ella puede cantarles, por ende solo ella tiene derecho a despedirlos con una canción lagrimosa o luctuosa.
Volví a pestañar para regresar mi atención al monitor de Hibiki.
A estas alturas no tiene caso o sentido sentir furia, dolor o cualquier emoción sobre medida porque todo esto pudo ser evitado. Como han dicho esos dos digimon solo nos queda un camino, derrotar con todo nuestro poder a Eita y rogar porque eso baste. Algo no me termina de encajar en todo esto, pero cada segundo cuenta. Desde el principio Hibiki era incapaz de siquiera hacer llegar su voz a Eita, con las heridas que ahora tiene más el desgaste energético dificulto que pueda si quiera seguir levantándose como nos tiene acostumbrados.
Rio
Re: Ira del agua
-pfffff… pero que divertidos son todos ustedes, ahora entiendo por qué a Eita le encanta molestarlos tanto- hasta el momento en que todos terminaron de hablar dejé escapar una leve risa y notar mi presencia aplaudiéndoles sarcásticamente -haaah… aun con toda su displicencia hasta ahora, se atreven a decir que “son los únicos que se presentaron a salvar…” y quieren pegarle a Eita pero son lo suficientemente absurdos como para quedarse todos aquí mientras a Hibiki le pegan cual saco de boxeo- negué con la cabeza sonriendo pero con los ojos cerrados -dejen de engañarse a sí mismos, si no fue por que los obligaron fue por el remordimiento de conciencia. ¿Lo saben? Para tener una historia trágica basta con matar a la heroína de buen corazón, porque “si ella muere, todos lloraran”, simple hipocresía, tee-hee-
Rebusque dentro del pequeño bolso que siempre colgaba de mi hombro, sacando varias hojas de papel sujetas de un clip, aclare la garganta y continúe hablado -ustedes creen que Eita es el malo a hervor de sangre, ¿Pero realmente lo es? Recapitulemos; cuando NEO nos declaró la guerra, ¿Hicieron algo? no, pero Eita se alió con él y lo mantuvo a raya; ¿Se molestaron en investigar el digimundo…? Tampoco; ¿Buscaron a los héroes legendarios o Digimon de alto rango…? Hmm… parece que no… Eita tiempo después se alió con todos. Cuando fue lo de Margaret… solo 3 de ustedes hicieron algo, la pequeñita de hielo, la pequeñita cantora, y la pequeñita “Me estoy muriendo”… y eso, es solo la punta del iceberg- les arroje el conjunto de papeles, en ellos venia toda la información que había recabado en el digimundo y de parte de los Demon lord, Bagramon, entre otros -hablan de ayudar a los demás, pero ni siquiera me ayudaron a mí en mi travesía por el digimundo; déjense de auto engaños, solo admitan que no quieren cargar con la culpa de no cumplir con su deber pese a que Etincel-sama ya no está, Misaka-san se tiró de cabeza a un gran rayo pero de alguna forma consiguió regresar por que ustedes no podían ni limpiarse la nariz solos. Reconozco que las tres excepciones del incidente con Margaret son las únicas que medianamente le hacen a la musaraña en hacer algo… pero, eso ahora da igual, Eita tiene las de vencer por más de una razón-
Me enderece de la cornisa que usaba como asiento sacudiendo mi falda; di un paso a una sombra anómala en la habitación perfectamente iluminada, cayendo dentro, al segundo siguiente caía de pie frente a la otra rubia -te crees muy valiente, ¿verdad pequeñita?- deduje reduciendo nuestras distancias a cero poniendo mis manos en sus hombros mirándola fijamente a sus ojos -les tengo malas noticias, lo que esos 4 se abstuvieron de decirles… por cada Eita que maten, el equilibrio y la capa que protege este universo ira colapsando además de que los demás universos se acercaran hasta colapsar con este, lo mejor es que ni siquiera afecta al original. Sin embargo, no podemos darnos el lujo de dejar ni uno solo vivo, ¿Por qué…? simple, si Hibiki-chan consigue derrotar de forma extremadamente milagrosa al original, cualquiera de los clones puede servirle como “Vida extra” o “Reinicio de partida”, por si fuera poco, puede jalar energía de cada alma que haya secuestrad a su “Lugar secreto”, por lo que tampoco podemos dejarle seguir matando a mansalva- di un paso hacia atrás tranquilamente sacando mi digivice -si no me creen, puedo sacar a Barba-chan para que el mismo les explique todo… aunque claro, eso nos costara aún más tiempo; también, ¿no les da curiosidad por que esos 4 son fantasmas pero no son succionados por Eita como las demás almas? El poco tiempo que estuve con Etincel-sama me contó cosas muy interesantes…- les propuse con un dejo de sarcasmo, principalmente para picarles la curiosidad, mientras sonreía -ara~~… pero es verdad, el tiempo nos es oro, ¿qué deberiamos hacer~~?-
Rebusque dentro del pequeño bolso que siempre colgaba de mi hombro, sacando varias hojas de papel sujetas de un clip, aclare la garganta y continúe hablado -ustedes creen que Eita es el malo a hervor de sangre, ¿Pero realmente lo es? Recapitulemos; cuando NEO nos declaró la guerra, ¿Hicieron algo? no, pero Eita se alió con él y lo mantuvo a raya; ¿Se molestaron en investigar el digimundo…? Tampoco; ¿Buscaron a los héroes legendarios o Digimon de alto rango…? Hmm… parece que no… Eita tiempo después se alió con todos. Cuando fue lo de Margaret… solo 3 de ustedes hicieron algo, la pequeñita de hielo, la pequeñita cantora, y la pequeñita “Me estoy muriendo”… y eso, es solo la punta del iceberg- les arroje el conjunto de papeles, en ellos venia toda la información que había recabado en el digimundo y de parte de los Demon lord, Bagramon, entre otros -hablan de ayudar a los demás, pero ni siquiera me ayudaron a mí en mi travesía por el digimundo; déjense de auto engaños, solo admitan que no quieren cargar con la culpa de no cumplir con su deber pese a que Etincel-sama ya no está, Misaka-san se tiró de cabeza a un gran rayo pero de alguna forma consiguió regresar por que ustedes no podían ni limpiarse la nariz solos. Reconozco que las tres excepciones del incidente con Margaret son las únicas que medianamente le hacen a la musaraña en hacer algo… pero, eso ahora da igual, Eita tiene las de vencer por más de una razón-
Me enderece de la cornisa que usaba como asiento sacudiendo mi falda; di un paso a una sombra anómala en la habitación perfectamente iluminada, cayendo dentro, al segundo siguiente caía de pie frente a la otra rubia -te crees muy valiente, ¿verdad pequeñita?- deduje reduciendo nuestras distancias a cero poniendo mis manos en sus hombros mirándola fijamente a sus ojos -les tengo malas noticias, lo que esos 4 se abstuvieron de decirles… por cada Eita que maten, el equilibrio y la capa que protege este universo ira colapsando además de que los demás universos se acercaran hasta colapsar con este, lo mejor es que ni siquiera afecta al original. Sin embargo, no podemos darnos el lujo de dejar ni uno solo vivo, ¿Por qué…? simple, si Hibiki-chan consigue derrotar de forma extremadamente milagrosa al original, cualquiera de los clones puede servirle como “Vida extra” o “Reinicio de partida”, por si fuera poco, puede jalar energía de cada alma que haya secuestrad a su “Lugar secreto”, por lo que tampoco podemos dejarle seguir matando a mansalva- di un paso hacia atrás tranquilamente sacando mi digivice -si no me creen, puedo sacar a Barba-chan para que el mismo les explique todo… aunque claro, eso nos costara aún más tiempo; también, ¿no les da curiosidad por que esos 4 son fantasmas pero no son succionados por Eita como las demás almas? El poco tiempo que estuve con Etincel-sama me contó cosas muy interesantes…- les propuse con un dejo de sarcasmo, principalmente para picarles la curiosidad, mientras sonreía -ara~~… pero es verdad, el tiempo nos es oro, ¿qué deberiamos hacer~~?-
Misaki
Página 3 de 4. • 1, 2, 3, 4
Página 3 de 4.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Jue Jul 01, 2021 1:04 am por Sophie Engel
» prometiste
Jue Jul 01, 2021 12:55 am por Sophie Engel
» mi tumba
Jue Jul 01, 2021 12:53 am por Sophie Engel
» vuelve
Jue Jul 01, 2021 12:29 am por Sophie Engel
» Second Chance
Vie Mayo 31, 2019 8:13 pm por Izayoi
» Catalogo de Reliquias legendarias disponibles
Vie Mayo 24, 2019 12:52 pm por Misaka
» Es un cliche...? seh, y que?
Vie Mayo 24, 2019 11:06 am por Etincel
» Ficha de Lena Izanagi
Dom Mar 24, 2019 8:59 pm por Lena Izanagi
» Stand Unrivaled
Dom Ago 19, 2018 3:51 pm por Misaki