[Isla artificial a las cercanías del triangulo de las bermudas] El misterio de la Isla Panchy [Mision de Akashi. S y Saya]

Misión Solicitada:

La industria que manufactura  al laboratorio parece que tendrá un reabastecimiento de sus suministros el día de hoy, a las 0430 horas, el barco que supone servir para enviar dichos suministros estará a la espera en uno de los puertos militares de USA en Miami. Para algunos ese detalle puede resultar suficiente prueba de que existe gato encerrado en lo dicho ya infinidad de veces por los altos mandos del laboratorio, para otros es entendible por el simple hecho de ser un laboratorio del gobierno americano. Sea como fuera, el barco pese a estar en un puerto militar carece de vigilancia en su totalidad, a excepción de los cargadores que pasan esporádicamente manejando trasportadoras a su interior y eventualmente salen sin la carga. Podrías usar este barco para infiltrarte en la isla…

El propio barco es también del tipo militar y es de un profundo negro mate, aunque en lugar de armamento parece tener varios contenedores metálicos de gran tamaño en cubierta perfectamente apilados.

imagen del barco:

No lo sabía, no tenía idea como había acabado allí pues hacía un rato me encontraba terminando el entrenamiento para comenzar el fin de semana largo en el cual tenía planeado ir a algún lugar junto a Selene y los Hotfix con tal de divertirnos así no estaríamos siempre encerrados en casa o el trabajo, incluso Selene se tomaba demasiado en serio el trabajo por lo que acababa enclaustrada en la habitación para confeccionar ropa.

Propuse ir a la playa por lo que la albina iba a esperarme fuera del colegio en un parque cercano, sin embargo, tan pronto llegué un portal aleatorio, vaya.... Mala suerte nuevamente, aparecimos posteriormente en una zona del Digimundo la cual Selene no conocía con exactitud y de pronto... Nuevamente, ésta vez caí sobre los brazos peludos y blancos de Selene la cual logró caer de pie.

Encontrar portales aleatorios que me llevan a cualquier parte del mundo humano, prácticamente era algo cotidiano en mi existir, por lo que había llegado al punto de cruzarlos mecánica y sub conscientemente con solo caminar a través de ellos. Eso es lo que había pasado hace unos momentos, en los cuales me encontraba caminando sin rumbo fijo por las calles de Japón hasta que un portal decidió abrirse en mi camino conduciéndome a otro punto. El mismo proceso de siempre fue el que lleve a cabo, peinar el nuevo sitio al que había llegado con la mirada con la esperanza de poder ubicarme aunque fuera un poco – (Un… puerto…) –medite sintiendo el olor a mar y observando el enorme navío que se erigía al frente mío. Su sola presencia enigmática acompañada de casi perderse a la vista por la negrura de su cuerpo idéntica a la noche resultaba atrayente para mí, como si me invitara a abordarle en sigilo como lo indicaba el mismo – ¿…? –un ruido capto mi atención, por un momento lo iba a atribuir a las grúas de transporte que pasaban con su propio ritmo hasta abordar el barco, pero de ser el caso el ruido debería de haberse repetido, lo que no fue el caso.

Dado que era ajeno al ruido del puerto y provenía del barco me aventure a investigarlo. Dando un salto usando vectores para impulsarme y llegar a abordarlo como si fuera un ninja de una película hollywoodense resulto la mejor opción… lo único que faltaba era el poder ubicar el ruido y que este no fuera una trampa… Con cautela de no ser descubierta por la tripulación me aventure en el barco en busca del ruido y el motivo del propio barco para ser tan indulgente en su misticismo.

ost de fondo :v:

Mientras que uno se queda en los brazos de su digimon sin hacer más nada, y la otra se pone a buscar la fuente del sonido ajeno al barco, que seguramente sean esos 2, los preparativos terminan y el barco comienza a moverse. Usualmente luces alumbrarían su paso para evitar que se estrellara con el puerto, pero no ocurre esta vez, solo se mueve de una forma tal que parece tener un súper radar que le permite al capitán movilizar la gran nave sin ningún esfuerzo

Cuando se aleja del puerto, las pocas luces que tenía encendidas en algunas partes del barco, como la sala de mandos o el puente se apagan y todo queda en un total silencio. Moviéndose a una buena velocidad pese a su gran tamaño, aún es muy temprano para que el sol salga, por lo que puede ser difícil mirar a profundidad

Selene levantó la mirada de mi y me bajó rápidamente de sus brazos, el barco parecía estar vacío en su totalidad a excepción de la carga que llevaba encima, nosotros y una nueva presencia que llamó la atención de la digimon zorruna blanca. Posteriormente comenzamos a inspeccionar la cubierta cuando las luces que hasta ahora habían permanecido prendidas dejaron de irradiar luz incluso en la cabina del capitán el fulgor de los bombillos blancos y amarillos se había marchado. Mi compañera me tocó el hombro y comenzó a caminar con sigilo siguiendo la presencia del segundo, además de nosotros, intruso en el navío. ¿Quién estaba dirigiendo el barco? De todos modos ¿Dónde estaba el personal del barco? De Buenas primeras aquellos que se supone debían trabajar aquí debieron atraparnos apenas llegamos. Más importante ¿Cuál era la dirección del barco?- Vamos a la cabina del capitán... -Murmure por lo bajo y la digimon olvidó la otra presencia para así guiarme hasta la cabina, podríamos separarnos, sin embargo no sabía que había dentro y Selene agudizada sus sentidos para no tropezar con ninguna escotilla o bajada.