Relajando un poco... Y algo más.

”¡Yey! Misaka puede abrazar al Dorumon” dice Misaka, Misaka intentando que Accel la suelte… “¿Heh? ……. ¡No me gustan las verduras!” dice Misaka, Misaka aferrándose a Accel como su fuera un Koala “No dejes que se acerque” le pide Misaka, Misaka a Accel

-¡hmpf!- se rasco la cabeza dejándome estar abrazada a su torso -¡espera ¿Qué?!- cuando se doy cuenta, Saya ya me estaba cargando caminando a lo que parecía ser una gran casa a la distancia, Accel la siguió rápidamente sin saber que decirle para que recapacitara y no fuéramos a la “fiesta”

Misaka, Misaka se siente un costal de patatas :3

-tch... para que ella quiera ir…- murmuro acomodándose la camisa que traía sobre su cabeza -en fin, mojada, yo me llamo Kuroyoru, la que tiene cara de que todos nos podemos morir se llama Saya, la pequeñita Last Order y la loca energúmena albina cara ****** se llama Accel ¿ustedes son…?- nos presentó a todos esperado a que la castaña y su digimon también siguieran el camino que marcaba Saya

-¡te escuche!-

-¡ese era el chiste~~!-

-…- suspire rascándome la cabeza -hmmm…- me lleve una mano al mentón -siento como si me hubieran dicho todos que me aleje de ellos…- pensé recordando a Renko -ahhh… bueno, míralo de esta forma, esta vez invadimos repentinamente tu cuarto por que no respondes mis llamadas ni los mensajes de Soma-

-¡aun dejando eso de lado! tu deber como agente es verificar si todo esto es una trampa, ¿me equivoco?-

-Yukki-onna, siempre andas muy estresada con tu trabajo, pero si esta fiesta resulta real y no una elaborada trampa, podrías divertirte muuuuucho con nosotros, tengo mucha hambre y estoy seguro de eso-

-Soma…- me acerque a su oído y susurre -hora del plan B- el solo asintió y abrió su libro -será más fácil de esta forma-

-¡….!- hojeo su libro y al encontrar cierto pasaje chasqueo los dedos, siendo tele trasportados los cuatro a la dirección que indicaba la carta -suerte que era aquí en Japón y no otro país- dijo rascándose la nuca y guardando su libro

-debimos entrar rápidamente al cuarto de Alisamon, tumbarla entre los tres y traerla desde el principio-

-tengo el presentimiento que Alisa me hará algo muy malo…- pensé acercándome más a Shio y Soma -espero arrastrarla a esta “fiesta” no termine peor de lo que imagino-

-¿hmm? Misaka, creo que esa chica es la edecán o…. ¿la maestra de ceremonias?- dijo primero tranquilo, y luego alzo una ceja al ver bien a la chica en la puerta, sus gestos nos recordaban de cierta forma a Alisa, solo que la chica ¿estaba nerviosa? o eso pensamos por como actuaba, y como llegaba otro chico bastante alto y de mala cara decidimos acercarnos también

-yukki-onna, ¿es solo que tengo mucha hambre o esa chicamon huele mucho como un digimon?- le preguntó en un susurro Shio a Alisa en lo que caminábamos a la reja de la gran mansión

-ese sujeto… ¿tiene un Kudamon en el cuello?- pensé afinando la vista; en silencio y también teniendo mala cara, Soma le dio la invitación a la chica de tatuajes

-¿tienen comida rica aquí?- pregunto Shio sin más sonriendo inocente

Una de mis cejas reacciono al comentario el harapiento escriba, no tenía la más mínima intención de otorgarle el poder pavonearse diciendo que le di la razón, pero en cierta parte de su raquítico argumento tenía un punto a su favor. Sin embargo, permanecí en silencio, haciendo oídos sordos a sus palabras. Pretendía ignorarlos hasta que se cansaran y procedieran a marcharse, grave error de mi parte; de un segundo a otro el escriba nos teletransportó al recinto del evento. Corrijo, al exterior del recinto – Misaka, no te libraras de esta tan fácil –susurre en su oído una vez nos pusimos en marcha para entrar al supuesto evento – Su presencia también no parece la de un humano –respondí en un susurro la duda del raptor. Reconoceré que mi opinión sobre el raptor mejoro con esa conjetura. “Lo bueno dura poco”, el propio raptor regreso a su idiotez por sí mismo – (Imposible creerle que pretende ser alguien débil y tonto… teniendo en cuenta el tiempo que llevo "Conociéndolo") –articule como un pensamiento rodando mis ojos…

-¿todavía agregas el “san”?- respondí rascándome la cabeza algo apenada -al menos no dijo nada de usar gafas de sol a esta hora- pensé aliviada -se llama Kanade, aunque se parezca un resto a la idol que en paz descanse, ella es una Dorulumon que sabe mucho de digimon y del loader- explique sonriente y emocionada -y pues… escuche que te habían dado de alta del hospital… apenas ahora pudimos venir a verte… lo siento-

Sentí la mirada de Kanade por un segundo y luego casi como un salva vidas hablo -es una carta, una invitación de hecho- dijo Kanade sacando la carta y leyéndola en su mente -que suerte es cerca de aquí y acepta digimon sin problema- explicó contenta -¿Qué dices amiga de Biki? ¿quieres venir con nosotras?- aunque no podía ver su cara claramente, estoy segura que tenía su gran sonrisa de siempre -seguro es otro hunter que quiere hacer colegas-

-¿está bien que vayamos a una fiesta solo por atrapar una invitación en el aire?-

-la firma un digimon, que no conozco… raro… ¡ahem! pero por como la escribió bastante genérica, de seguro tendrá algún poder de réplica y multi envió, ¿entiendes? Lo más posible es que enviara cartas al por mayor, pensando que cualquiera y nadie podía ir-

-hmmm… eso tiene sentido para mí- dije luego de pensarlo por unos segundos -¡vamos!-  tome de la mano a Rio y a Kanade para correr sin rumbo fijo

-¡es-espera Hibiki! No sabes la dirección- como pudo me detuvo -dios… creo que es la mansión esa gigante que parece demasiado grande para este país; vamos… con calma ¬¬- tras decir eso mirándome despectivamente nos pusimos en marcha de la casa que dijo Kanade

Por supuesto, eres mayor que yo por 2 años. Entiendo, es un gusto Kanade-san; dicho eso, he de suponer eres una compañera de Hibiki-san, a serte honesta nunca creí que alguien como ella consiguiera a alguien más. ¿Mmm? Jajaja… no te preocupes por eso Hibiki-san, estoy consciente que tras tanto tiempo, debes de tener tus propias ocupaciones y problemas.

Master, se ha demorado demasiado, ¿Está todo en orden?

Marin llego a la puerta, desde varios puntos ciegos para no ser vista por las visitas, al indicarle que podía salir tranquilamente con un gesto de mi mano, salió de entre unos arbustos. Dio una reverencia a ambas jóvenes, para luego entrar al loader, era raro que me tomara tanto tiempo con alguien que no fuera ella  mi hermano; al darse cuenta que eran conocidas mías se relajó lo suficiente como para “Dejarme sola”.

Ya veo, es una invitación… ¿Mmm? Para mí una explicación tan pobre-- ¿HEH?

Sin darme tiempo u oportunidad a reaccionar, Hibiki-san nos tomó de la mano a ambas interlocutoras, para salir disparada valiéndole poco todo el entorno o si quiera saber a dónde se dirigía. Tenía más fuerza en ella de la que recordaba que tenía; por fortuna su aliada consiguió detenerla haciendo que recapacitara sobre su método de movilización.

Seriamente Hibiki-san, no has cambiado ni un ápice… me alegra y relaja saber que tienes una aliada que sepa cómo controlarte como Kanade-san.

Expliqué tomando un respiro, agitarme o gritar solo hubiera hecho preocupar innecesariamente a Marin, ocasionando una escena por completo innecesaria. Lo que me costaba entender de ambas, era la en extremo confianza a los desconocidos que tenían. Seguramente por ello se lleven tan bien…

Janaan se fue tras haber tratado de invitarme, normalmente seria yo quien estaría jalando a Janaan y este me diría muy  nerviosos que aún no terminaba de cumplir sus deberes y yo solo me reiría, mientras jalaba a mi hermano a alguna fiesta, para disfruta de bailar, pasarlo bien, beber hasta ni acordarte de donde diablos esta tu sombra, comer algunas cosas y disfrutar de la música…

Sentí que mis dedos se doblaban cerrándose en un puño, extrañaba la música, escucharme cantar, tener una conversación, correr, saltar libremente. Me reí de pensar eso y decidí buscar algo para entretenerme, salí de mi cama cuando dos pares de mano sujetarlo cada una de mis manos el aroma de girasol y lirio blanco llegaron a mi nariz.

-¿Anwar? ¿Adham?- pregunte un poco confundido antes de ser jalado y forzado  bañarme y cambiarme arrastrado por ellos mientras uno me escribía sobre mi brazo.

“soy Anwar, no creo que disfrutemos la fiesta sin ti”

-pero… ¡oigan que no les dijo Janaan que no iría!-

“tampoco es como si tuvieras algo mejor que hacer”

No puedo verlos pero seguro se estaban riendo de mí, menudos mocosos, sonreí a pesar de todo. Una mano se posó en mi hombro y sentí el aloma de lavanda y hierva buena que Janaan usa.

Senti el aire frió del exterior y divertido dije-tengo una forma más rápida de llegar- saque mi loader –reload Darkness Trailmon-  

Sentí a los gemelos jalarme parecían muy emocionados en ir en tren, entramos en unos vagones y nos sentamos en el los  asiento y permanecimos ahí mientras Darnkes trailmon viajo por la sombras al lugar de la fiesta, saque de mi loader a Shoutmon, conociéndolo le gustaría estar en la fiesta, al llegar salí con los gemelos y Shouthmon guiándome, apenas pise fuera de los vagones devolví a Darkness Trailmon a mi loader, mientras era jalado y empujado a quien sabe dónde.


-¡vamos, vamos!- gritaba emocionado shuotmon empujado a magnus.

Anwar se reía mientras apretaba el paso, seguido de cerca por Adham.

adham y anwar:

-¿heh…? ¿q-qué me quisiste decir?- active un porcentaje más alto del equipo para ver el aura de Ri-chan, pero al hacerlo el scaner activo una alarma de peligro inminente; detecte al mismo tiempo varias auras en esas fracciones de segundo, un tren empezó a emerger -¡…!- como si Metal también pudiera ver ese tren saliendo de la nada, cuando agarre el loader y lo moví hacia adelante corriendo con el equipo activado al máximo para adelantar al tren y evitar se estrellara con la casa o la gente que veía en la entrada, el saco su gran mano metálica atrapando la parte delantera del tren levantándola -¡GROOOAAHHH!- para ese momento ya había hecho la xros con Julse, clavando los pernos de las piernas y cintura en el suelo para evitar el avance y que el peso me ganara por la gravedad de la colina, también había liberado a los pawn para que formaran una hilera a cada lateral de los vagones para que el tren no se descarrilara o volcara por la frenada obligada con ayuda de sus barreras

-ahia… no se puede tener un día de tranquilidad…- dijo Kanade Kanade cargando en un brazo a Rio y en el otro a un chico…. Bastante flaco y quizás albino con un digimon -por suerte, Biki-chan reacciono a tiempo-

-esa… voz…- murmure con trabajo deteniendo el tren mientras los tripulantes bajaban, parecía tranquilos pese a que por poco y se llevan a todos en la entrada -lo sabía…- cuando el dueño del tren lo regreso a su loader los pawn se cayeron de espaldas por el esfuerzo, habría hecho lo mismo de no ser por los pernos -¡Magnus-san! ¡holas!- dije alegremente por escuchar a todos bien -¿cómo has estado?- le pregunte con una gran sonrisa, aunque no pude mantener por más tiempo la xros con Julse casi cayéndome al suelo de no ser porque él me atrapo

-pfff… me ganaste al decir que el mudo humano es mas divertido-

-¡Jaja!- le respondí también con una sonrisa a Julse -quizás no debí de hacer eso…- pensé bajando al mini la xros de sinestesia

Fuera de la morada, donde Serafín y sacerdotisa discutían verificando la decoración y la comida; "verificando" quería decir que la menor seguía al mayor dándole algún que otro puntapié por "degustar" la comida sin que los invitados hubiesen llegado. La joven se dedicaba a peinar el área con su mirada mientras esperaba la llegada de los niños elegidos, más que nerviosa, sentía la enorme necesidad de... Ir a por la menta para gatos que había en alguna parte detrás de las coronillas de novia, estaba segura que su "tío" las había escondido cerca de la entrada para que su personalidad fuera menos áspera y hosca, algo que había logrado de momento pero la digimon con nombre de dios vengativo no tenía ni el más mínimo impulso por llevarse bien con el resto, su carácter era normalmente algo antisocial, fuerte y sin dudas complicado. Era conocida por no prestar simpatía a nadie que no le cayera bien, incluso si eso significaba estar en la soledad umbría de las sombras. Su atención se vio mermada por la presencia de un Digimon, dicha criatura venía dando compañía a un monje que, supuso, era un niño elegido ¿Simplemente había llegado caminando? Posterior a él se presentaron cuatro personas más, dos de ellas no olían ni tenían presencia de humanos, una albina de ojos celestes con ropa casual y una niña pequeña de cabellos y ojos castaños con facha de pequeña de primaria, parpadeó al verla sin quitar la inexpresividad que exhibía su rostro.

Decidió que presentarse y dar su forma digimon era lo mas sensato, así el resto de los digimon estarían como al ver que podrían pasar como si nada. Cogió los bordes del enrejado y las abrió de par en par con fuerza que poco aparentaba- Disculpen el frío y que los reciba aquí. Me llamo Horus, aquellos digimon que quieran pueden entrar en forma humana o digimon. Yo soy... -Terminó de abrir la pesada puerta y una esfera de datos la rodeó para dejarla en forma digimon, un león humanoide negro de detalles dorados y rojos- Un Lowëmon. No se alerten, no es una trampa... Aquel que firmó las invitaciones es un Digimon Serafín. Responderé a todas las preguntas que posean, aunque aún han de llegar mas niños elegidos pero dejaré los portones abiertos.. Los que deseen, pueden adelantarse. -El guerrero leonino hizo una venia y volteó para guiarlos hasta la mansión, algo que no duró demasiado al escuchar como algo se estrellaba o más bien, era detenido de forma súbita, volvió a voltear con lanza en mano- ¿Qué demonios? -Miró el Trailmon detenido colina abajo y parpadeó- .... Los niños elegidos... ¿Siempre causan tanto desastre donde quiera que van? -Preguntó con su inexpresiva facción.

Dentro el Serafín continuaba comiendo algún que otro postre, acabando sin piedad con los chocolates, hasta que recibió un golpe en la cabeza de parte del báculo de su hermana, estaba en su forma mega, con un poco de magia podía reducir su tamaño para no hacer pedazos el lugar. La Sakuyamon albina se encontraba furiosa- ¡Basta! ¡Dije basta, deja de comer alimaña masculina! No sólo es de mala educación sino que a este paso acabarás con todos los postres, maldición... -Soltó un suspiro agarrando su tabique con hastío cuando sintió la presencia de los digimon invitados, miró hacia atrás notando la presencia de un nuevo azabache con ojos plateados comiendo un aperitivo salado- Umai... -Sonrió, acostumbrada a la nueva presencia de su niño elegido y cogió a su hermano del cuello de la camisa frenando su paso- Luka ¿Cómo te encuentras? -Los ojos plata, como espadas relucientes, se clavaron en la digimon y una sonrisa labial apareció en el rostro de su camarada el cual asintió. Sin embargo al escuchar un estruendo en la parte de afuera se miraron entre los tres saliendo hasta la entrada de la mansión donde notaron a los invitados y a Horus en su forma de Lowëmon, mucho más allá parecía haber una especie de problema, no se veía correctamente pues la casa se encontraba cuesta arriba.

El Serafín abrió un portal que lo llevaría hasta unos metros de la entrada, la primera en pasar fue la digimon albina que, en su forma de renamon blanco, apenas llegó y divisó el Trailmon oscuro no se dio demasiado tiempo para observar a los invitados y desapareció volviendo a aparecer donde Hibiki y los demás. Primero se encontró con la niña castaña claro, luego de peinar el área notando a los demás, icluyendo a Kanade, la cual intuyó no era humana frunció el ceño- Biki - San ¿Están bien? Qué sucedió? -Mientras la digimon consultaba preocupada por el estado del resto del mismo portal por el que cruzó salieron tanto el anfitrión de la fiesta como el dueño del lugar. Vestido en con una camisa blanca de un solo botón abrochado, sobre ésta un sobretodo con las mantas arrancadas, pantalones y zapatos negros. Los ojos plata observaron a los invitados- ¿Se encuentran todos bien? -Azrael silbo sorprendido.

El iC bio reacciono a la presencia de digimon, instintivamente di media vuelta, para concebir la vista de un tren surgir de la nada misma. Decir que era un tren es un error bastante grande de mi parte, aquella maquina era un digimon, un Trailmon of Drakness para ser exacta. Si Misaka y sus dos idiotas continuaban diciendo que esto no era una trampa, realmente tendrían que ir a un neurólogo para examinar su cerebro, pues es un hecho que estamos en la ruta de avance de ese tranvía…
– (vaya forma de morir más anticuada…) –pensé corriendo hacia el tranvía con digisoul en ambos puños cuando un borrón lo intercepto primero que nadie – ¿Esa es…? –de forma increíble, lo detuvo con ayuda de una mano gigante de metal y el equiparse una especie de armadura encima, inclusive evito todo tipo de daño con ayuda de Pawn Chessmon – … –enmudecí al ver quien bajaba del tren; reconocí al peli azul y la niña que había llegado a DARS sorpresivamente aquella vez en el acto. Pensé seriamente si todo esto era una rebuscada y forzada broma para solo terminar murmurarle a Littleone en su oído – Tu deuda solo se agranda cada día….

Puse en retrospectiva a ambos portadores del loader, ambos caían en una imprudencia sin límites, ni los más nuevos reclutas o él llegarían a este punto, uno usa un digimon como transporte en pleno mundo humano y la otra se mete en el camino de un Trailmon como si fuese cualquier cosa – (¿Estos son los soldados de la diosa?) –medite con una mirada fría y seria – (Si pertenece al mismo grupo no debo de ser mejor… si tomo en cuenta esa ley...).

-¿huh?- que Alisa de repente se diera media vuelta y se echara a correr con Digisoul en sus manos nos sorprendió  a los 3, cuando giramos vimos por qué -¡chicos!- más me había tardado en hablar que en lo que Soma ya había sacado su libro comenzando a apuntar la situación por si algo salía mal poder repetirla y Shio corría con una velocidad abrumadora a una lateral del Trailmon para poder envestirlo y tumbarlo. Estaba por pasar una carta por el d-ark cuando Shio me dijo que me detuviera viendo a través de sus ojos a Hibiki deteniendo el tren -¿e-está loca?- casi grite boquiabierta

-joder, con “loca” te quedas corta…- respondió rascándose la nuca y guardando su libro -para invitados que se consiguió…- dijo fulminando con la mirada al joven de cabello de negro y camisa blanca

-¿heh? ¿deuda?- no entendí bien por qué me decía eso Alisa hasta que Shio miro a los que había bajado el Trailmon, el del cabello azul tenía una venda negra en ojos y oídos -¡Alisa! ¿cómo quieres que yo sepa con qué tipo de gente se relaciona Hibiki-san?- le pregunte desganada y obvia -mucho menos sabría que ellos también vendrían hoy- suspire recargándome en Soma

-¿no se te haría más fácil pagarle lo que sea que le debas?-

-si supiera que le debo ya le habría pagado…-

-¿hah? ni que fuera una imbécil que no sabe diferenciar cosas- respondió borde negando con la cabeza -en cualquier caso, es más probable que termine cargándose mirada de asesina con nosotras 3 a su alrededor- agrego sujetando su nuca con una mano y desviando la mirada, pudiendo ver así lo ocurrido con el tren quedándose con el ojo cuadrado prácticamente

-¿Eso se le hace divertido?- preguntó Accel resoplando -¿y somos la mala influencia?- agrego poniendo más mala cara de lo normal

”Saya, mira; son Original, Shio y Soma” dice Misaka, Misaka señalando a Original y sus amigos con mucha alegría sin poder ir con ellos pues aún es un costal de patatas

-espera Saya, después de eso ¿aun quieres ir a esa “fiesta”? ¿y si otro tren cae de la nada y nos aplasta?- iba a decir una protesta, pero luego recordó que cuando Saya se decide por hacer algo, es cosa de seguirla o alejarnos de ella -¡tch! esto está más jodido que cualquier otra cosa que hayamos pasado-

-es cosa de acaparar una mesa cerca de los bocadillos y alejar a los demás,- dedujo con una ancha sonrisa -o mejor aún, acaparar la propia mesa de la comida y fin-

– Los niños elegidos atraen con facilidad los problemas, caos y destrucción porque fungen como escudos y/o salvadores; con lo cual, un tren emergiendo sin más miramiento ahora es relativamente común –articulé a manera de respuesta, además, la hunter pudo frenarlo a tiempo y evitar un descarrilamiento así como también la muerte de alguien; prestarle más importancia a esa situación seria un pérdida de tiempo.

Seguramente pasarían más cosas de la misma índole en esta fiesta; por mucho que el anfitrión tuviese las mejores intenciones, de esas misma está compuesto el infierno. Mi investigación podría desembocar en un buen hallazgo o sencillamente quedar igual de trunca, como hasta ahora. Ahora bien, el solo hecho de ver una hunter realizar una xros humana, una Sakuyamon albina y al dador de las cartas ya es bastante. Dando un vistazo superficial, podía percatarme de varios Digimon y elegidos formidables – Anfitriones, quizá para la siguiente deban facilitar trasportes más eficientes y seguros para cada invitado. Hubo alguien que se perdió y ahora este Trailmon… sí pudieron enviar esas cartas a prácticamente todo el planeta ¿Por qué no abrir portales para un arribo seguro? –indique al estar cerca del joven de cabello negro y sus camaradas que habían salido de un portal segundos atrás mientra yo aun acarreaba en el brazo a Last.

-cielos… siento el cuerpo todo acalambrado- pensé sentándome en el suelo sintiendo como Julse me cargaba en sus brazos -¡Selene-chan! si, estoy bien, solo un poco cansada... Julse, tengo hambre-

-yo también- me dedicó una sonrisa pero al mirar al joven que me hablaba se puso serio -conocerlo es decir mucho; con suerte sabemos su nombre. Hibiki suele ser muy confiada y platicadora, por eso da el palo de conocer a todos, con su permiso- explicó dando un paso hacia atrás para luego ir con Kanade y los demás -hey tu, espero tengan suficiente comida, o si no,,,- bromeo con el que había cambiado lugar con Akashi

-chica, chicos ¿están bien? Espero no haber sido muy brusca al recogerlos entre tanto salto- tras decir eso se rio quitándole importancia a todo lo sucedido y dejando a los tres de pie en el suelo -ustedes dos están muy flacuchos, deben de venir con nosotros un día de estos al gimnasio de Leomon a entrenar un poco y mejorar su dieta- dijo sonriéndoles y marcando los músculos de su brazo

-Kanade…- dijo en un suspiro mirándola fijamente

-¿qué? con nuestra vida ya deberías de estar acostumbrado que estemos por morir cada 5 minutos- dijo sacudiendo su mano como si ya fuera común para nosotros todo esto

-no era eso…- suspiró -este chico… creo que le afecto más de la cuenta tu ajetreo…-

-¿huh...? ¿lo crees?- volteo a ver al chico -creo que estoy muy mal acostumbrada a Hibiki y a salir disparada con ella- miró al cielo rascándose la cabeza

-ya lo reviso yo…- subí de nuevo el porcentaje de la xros y lo mire -… ¿¡…!?- me sorprendí mucho, él tenía un color raro, era un blanco grisáceo muy pálido y casi extinto, no un gris normal en los que tienen hambre o un blanco de los que están tranquilos, era una especie de bruma casi extinta -¡o-oye! ¿estás bien? ¿qué te ocurre?-